miércoles, 3 de diciembre de 2025

358.- CASA PALACETE DE LOS CASARES - GRADO (GRADO/GRAU)

 

Situada en la Plaza de Indalecio Corujedo, en el centro de Grado, fue construida en 1890 para el indiano D. Álvaro Menéndez, emigrante en Cuba. Se trata de un edificio de gran calidad con planta cuadrada y dos pisos. Llaman la atención las esculturas femeninas que representan las cuatro estaciones en la escalera que daba acceso al jardín, el cual fue eliminado al construir un aparcamiento debajo. A los pies de cada una de ellas está labrado el nombre de la estación correspondiente. En este edificio se instaló el primer ascensor en una vivienda de Grado.

No he encontrado información de cómo pasó la casa a la familia Casares, salvo que la habitaron las hermanas Casares.

El matrimonio formado por Valentín García Casares (¿? -1869) y Benita Rubín de Celis y Llanos (1790-1857) tuvo cuatro hijas: María Rosario Salomé Casares Rubín de Celis (1818-1894), casada con Valentín Longoria Casares (hijos: Nieves, Saturnina María Filomena, Engracia, Saturnina, Socorro, Luis, Benita Martina, Felipe, Lorenzo, Rosario, Soledad y Alejandrino); Teresa Casares, casada con Santiago Arguelles -Meres (sin hijos); María Josefa Casares (soltera) y Cándida Casares (soltera).

El órgano de la iglesia fue financiado por Cándida Casares y Rubín de Celis y se inauguró en 1913, mientras que su hermana Teresa financió un lavadero en 1905. Cándida no pudo disfrutar mucho del sonido del órgano, ya que falleció el 20 de enero de 1914 en esta casa de Grado. Fue la última hermana en fallecer. Después la habitó su sobrina Socorro Longoria y Casares, que falleció en 1924 a los 75 años, siendo enterrada en el cementerio de Grado.

Tras años de abandono, se puso en venta y el empresario moscón José Vidal Fernández Fernández contactó rápidamente con la familia madrileña propietaria del inmueble, llegando a un acuerdo para así poder cumplir su sueño de juventud de comprar el viejo edificio. La casa estaba en un estado de conservación muy precario. Tras emplear más de una década en su rehabilitación, el empresario convirtió el antiguo desván de la casa en su vivienda y dedicó el resto de estancias originales del inmueble al alquiler de oficinas para empresas. Las puertas de madera noble recobraron su esplendor, se recuperaron las impresionantes pinturas del techo, se restauraron muebles antiguos y el antiguo jardín se convirtió en un patio encima de un aparcamiento. En el año 2003 llegó el primer inquilino empresario. D. Vidal Fernández falleció en Grado el 19 de marzo de 2023 a los 81 años. Con el paso del tiempo, todos los vecinos de Grado conocen al edificio como la «Casona de Vidal».













Detalles añadidos por D. José Vidal Fernández Fernández